Lecturas y Evangelio del Lunes de la III Semana de Adviento

Hoy, lunes 15 de diciembre ...
Señor, purifica mi corazón para que tu Palabra caiga en él y dé el ciento por uno
Primera Lectura
Lectura del libro de los Números (24,2-7.15-17a):
EN aquellos días, Balaán, tendiendo la vista, divisó a Israel acampado por tribus. El espíritu de Dios vino sobre él, y entonó sus versos:
«Oráculo de Balaán, hijo de Beor,
oráculo del hombre de ojos perfectos;
oráculo del que escucha palabras de Dios,
que contempla visiones del Poderoso,
que cae y se le abren los ojos:
¡Qué bellas tus tiendas, oh Jacob,
y tus moradas, Israel!
Como vegas dilatadas,
como jardines junto al río,
como áloes que plantó el Señor
o cedros junto a la corriente;
el agua fluye de sus cubos,
y con el agua se multiplica su simiente.
Su rey es más alto que Agag,
y descuella su reinado».
Y entonó sus versos:
«Oráculo de Balaán, hijo de Beor,
oráculo del hombre de ojos perfectos;
oráculo del que escucha palabras de Dios
y conoce los planes del Altísimo,
que contempla visiones del Poderoso,
que cae en éxtasis, y se le abren los ojos:
Lo veo, pero no es ahora,
lo contemplo, pero no será pronto:
Avanza una estrella de Jacob,
y surge un cetro de Israel».
Palabra de Dios
Salmo
Sal 24,4-5ab.6-7bc.8-9
R/. Señor, instrúyeme en tus sendas
V/. Señor, enséñame tus caminos,
instrúyeme en tus sendas:
haz que camine con lealtad;
enséñame, porque tú eres mi Dios y Salvador. R/.
V/. Recuerda, Señor, que tu ternura
y tu misericordia son eternas;
acuérdate de mí con misericordia,
por tu bondad, Señor. R/.
V/. El Señor es bueno y es recto,
enseña el camino a los pecadores;
hace caminar a los humilles con rectitud,
enseña su camino a los humildes. R/.
Aleluya, aleluya, aleluya.
Muéstranos, Señor, tu misericordia y danos tu salvación.
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Mateo (21,23-27):
EN aquel tiempo, Jesús llegó al templo y, mientras enseñaba, se le acercaron los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo para preguntarle:
«¿Con qué autoridad haces esto? ¿Quién te ha dado semejante autoridad?».
Jesús les replicó:
«Os voy a hacer yo también una pregunta; si me la contestáis, os diré yo también con qué autoridad hago esto. El bautismo de Juan ¿de dónde venía, del cielo o de los hombres?».
Ellos se pusieron a deliberar:
«Si decimos “del cielo”, nos dirá: “¿Por qué no le habéis creído?”. Si le decimos “de los hombres”, tememos a la gente; porque todos tienen a Juan por profeta».
Y respondieron a Jesús:
«No sabemos».
Él, por su parte, les dijo:
«Pues tampoco yo os digo con qué autoridad hago esto».
Palabra del Señor
COMENTARIO DE BENEDICTO XVI
El pasaje de Mateo 21,23-27, donde los sacerdotes y ancianos cuestionan la autoridad de Jesús en el Templo, es un texto clave que Benedicto XVI interpretó en su enseñanza sobre la autoridad divina de Cristo, destacando que su poder no venía de una autoridad terrenal sino de Dios, y que la respuesta de Jesús sobre el Bautismo de Juan era una forma inteligente de revelar esta verdad, poniendo en evidencia la hipocresía de sus oponentes y la necesidad de reconocer la autoridad de Dios en Jesús, algo que resuena en la liturgia y la reflexión católica sobre la misión de Jesús.
Contexto del Pasaje (Mateo 21,23-27)
En este pasaje, los sumos sacerdotes y ancianos se acercan a Jesús mientras enseña en el Templo y le preguntan: «¿Con qué autoridad haces estas cosas? ¿Quién te ha dado esta autoridad?». Jesús responde con otra pregunta: «¿De dónde era el bautismo de Juan, del cielo o de los hombres?». Ante su silencio, Jesús concluye diciendo que si no le responden, él tampoco les dirá con qué autoridad hace sus obras, desafiando su autoridad y revelando que ellos mismos no creían en el origen divino de Juan el Bautista.
La Perspectiva de Benedicto XVI
- Autoridad Divina: Benedicto XVI, en sus escritos y homilías, enfatizaba que la autoridad de Jesús es intrínsecamente divina; no es una autoridad delegada, sino la de Dios mismo.
- Rechazo de la Autoridad de Jesús: La pregunta de los sacerdotes muestra su falta de disposición a reconocer que Jesús actúa con el poder de Dios, prefiriendo una autoridad humana o rabínica.
- La Astucia de Jesús: Jesús utiliza su respuesta para mostrarles que su autoridad está ligada a la de Juan, un profeta del Señor. Al no querer reconocer a Juan, se cerraban a reconocer a Jesús.
- Llamada a la Fe: Para Benedicto XVI, este pasaje es una llamada a discernir la verdadera autoridad, que no se impone, sino que se reconoce en el amor y la verdad de Dios encarnado en Jesús, invitando a la conversión y a no resistirse a la voluntad divina.
En resumen, la enseñanza de Benedicto XVI sobre este pasaje subraya la confrontación entre la autoridad terrenal y la autoridad divina de Jesús, un tema central en su pontificado, mostrando cómo Jesús desmantela las pretensiones de los líderes religiosos y llama a la fe en su misión divina.
Ejército Remanente...