jueves, 14 de enero de 2010

La catedral católica de Puerto Príncipe ha quedado prácticamente destruida



13/01/2010

Católicos de Haití: “Rezad por nosotros”
Fallece en el terremoto el arzobispo de Haití; los misioneros se movilizan. La Iglesia está sufriendo terribles pérdidas.
El obispo de Puerto Príncipe, monseñor Joseph Serge-Miot, ha fallecido en el violento terremoto que flageló este martes (12-1-10) la capital de Haití y su cuerpo ha sido encontrado en los escombros del arzobispado, según han confirmado en Roma fuentes misioneras.
Testimonio de misioneros: "Estamos por los suelos" ("Nou atè nèt", en creole), ha explicado en un mensaje de correo electrónico enviado a MISNA el padre André Siohan, de los misioneros de Santiago.
La catedral católica de Puerto Príncipe ha quedado prácticamente destruida
"He estado en el centro de la ciudad esta mañana para visitar a las comunidades religiosas amigas: la zona está totalmente devastada y hay miles de víctimas. Es terrible. Todos nosotros estamos bien, pero no tenemos noticias de algunos de nuestros seminaristas. Alguno ha quedado herido, quizá alguno haya muerto. Rezad por nosotros", pide el misionero que logra comunicar a través de un sistema por satélite.
El hermano de esa institución religiosa, el padre Pierre Le Beller, informa a MISNA que "bajo tiendas de campaña instaladas en el jardín de nuestra casa dañada por el terremoto, se encuentran en este momento nuestros hermanos, algunos seminaristas, amigos y vecinos del barrio de Pacot. Tenemos miedo de que haya un numero altísimo de heridos: la verdadera emergencia será atenderles", dice Le Beller, subrayando que ya, en tiempos normales, los hospitales sufren muchas limitaciones en el país más pobre de esa zona del Caribe.
"Los testimonios son aterradores, se escuchan los gritos y el llanto de los heridos, nos preguntamos cuántos habrán quedado bajo los escombros... Nos dicen que la catedral se ha derrumbado…".
Por su parte, al final de la audiencia general de este miércoles (13-1-10), el Papa Benedicto XVI hizo un llamamiento "por la dramática situación en que se encuentra Haití".
Pienso, en particular, en la población duramente afectada por un devastador terremoto, hace unas pocas horas, que ha causado graves pérdidas en vidas humanas, un gran número de personas sin hogar y de desaparecidos y serios daños materiales.
"Invito a todos a unirse a mi oración al Señor por las víctimas de esta catástrofe y por aquellos que lloran su muerte. Aseguro mi cercanía espiritual a quien ha perdido la propia casa y a todas las personas afectadas, en distintos modos, por esta grave calamidad, implorando de Dios consuelo y alivio en su sufrimiento.
Hago un llamamiento a la generosidad de todos, para que no falte a estos hermanos y hermanas que viven un momento de necesidad y de dolor, nuestra solidaridad concreta y el apoyo de la comunidad internacional. La Iglesia católica no dejará de activarse inmediatamente a través de sus instituciones caritativas para responder a las necesidades más urgentes de la población".

Fuentes: Zenit y V.I.S. Foto: Infocatólica