miércoles, 12 de septiembre de 2007

El Santo Rosario




Consejos y un poco de historia sobre el Santo Rosario , que debemos todos los Católicos de practicar diariamente y ojala en familia , son muchas las Bendiciones, Milagros y testimonios en el Mundo entero de favores de La Madre Divina ; acordemonos de nuestras Madres y Abuelas , y su devoción por el Santo Rosario.




A. ¿Cómo rezar mejor el Rosario?
B. Historia del Rosario.

A. ¿CÓMO REZAR MEJOR EL ROSARIO?
El Rosario es una oración vocal y mental, donde el rezo de las avemarías va unido a la meditación de la vida de Jesucristo. Para rezarlo mejor suelen darse varios consejos.

1. Antes de empezar

Buscar un momento y lugar apropiados. Si se reza en una iglesia, o en familia, o acompañado de otros puede obtenerse una indulgencia plenaria, con las condiciones acostumbradas. En otros casos, la indulgencia será parcial.
Proponerse alguna intención. Por ejemplo, rezarlo en acción de gracias o para obtener un auxilio de nuestra Señora. Puede rogarse por esa intención varias veces a lo largo de las avemarías.
2. Mientras se rezan las avemarías.- Hay varias posibilidades:
Contemplar el misterio de la vida del Señor que se dice al inicio.
Imaginarse que uno lo reza en compañía del Papa o de algún santo.
Imaginar que uno entona una canción a nuestra Señora y repite el estribillo.
Remarcar alguna palabra del avemaría (unas veces una, otras veces otra). Por ejemplo, Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita tu eres entre todas las mujeres y bendito el fruto de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.




B. HISTORIA DEL ROSARIO
1. Formación del Rosario. Los dominicos.

Siglo XII
Aunque ya existía la costumbre de repetir avemarías en número variable, fue en el s XII cuando se fijó el número de 150, equivalente al de los salmos, para acompañar a los monjes mientras ellos recitaban los salmos del oficio divino. Ya en el siglo XIII, los cistercienses hacen tres grupos de 50 avemarías.

Siglo XIII
Nuestra Señora se aparece a Santo Domingo de Guzmán, le entrega el rosario y le impulsa a difundirlo por el mundo. Santo Domingo cumplió este encargo "con la más acendrada fe en la devoción del santo Rosario, que fue el primero en propagar, y que personalmente y por sus hijos llevó a los cuatro ángulos del mundo" (León XIII, "Supremi apostolatus").

Siglo XIV
Los cartujos intercalan el padrenuestro y meditan distintos momentos de la vida del Señor. Añaden "Jesús" al avemaría.

Siglo XV

El Beato Alano de Rupe (1428-1475), dominico, unificó los elementos del Rosario y le dio forma definitiva. Eligió el nombre de los quince misterios y fundó la cofradías del Rosario. Otros dominicos colaboran.
En esos años se añaden las letanías y se completa el avemaría añadiendo la parte final: "Santa María, madre de Dios, ruega por ...". Esto da lugar a una curiosa paradoja: es posible afirmar que el Rosario existió antes que el avemaría (ya se entiende).
Los Papas aprueban el Rosario (Sixto IV en 1479), y le otorgan indulgencias (Inocencio VIII en 1485, bula Sacer Praedicatorum Ordo).
2. Siglo XVI. Expansión. Lepanto.
- Las cofradías del Rosario se extienden por todas partes. Sus miembros adquirían la obligación principal de rezar el Rosario.

- Los dominicos propagan el Rosario en la América recién descubierta. Pronto adquirió gran popularidad.

- 1569. San Pío V en la bula "Consueverunt Romani Pontifices" estableció oficialmente la forma de rezar el Rosario que se ha mantenido hasta ahora.

- 1571 (7 de octubre). En el Mediterráneo, los turcos asolaban los pueblos cristianos asesinando, robando y tomando numerosos cautivos. Para poner fin a esta situación, se organizó una flota que se enfrentó a la armada turca -más numerosa- en el golfo de Lepanto. Esta famosa batalla supuso un gran alivio para los cristianos, que atribuyeron la victoria a la intercesión de la Santísima Virgen invocada en todas partes con el Rosario. El mismo Papa San Pío V participaba en una procesión rezando el Rosario por este motivo, cuando milagrosamente conoció y anunció la victoria. Después, añadió a las letanías "Auxilio de los cristianos", e instituyó la fiesta de Nª Sª de la Victoria, que más tarde pasó a llamarse Nª Sª del Rosario. Y el Rosario se propagó intensamente.

3. Iniciativas posteriores en torno al Rosario.

Siglo XVII
1629. Surge el Rosario perpetuo. El dominico Timoteo Ricci repartió 8760 tarjetas -tantas como horas tiene el año- entre quienes aceptaban dedicar una hora al año a rezar los quince misterios del Rosario. En 1858 se propuso una hora mensual.

Siglo XVIII . . . Nace la procesión popular del Rosario de la aurora.

Siglo XIX
Se propaga el Rosario viviente: Se forman grupos de quince personas que se comprometen a rezar diariamente un misterio del Rosario. Así cada grupo reza día a día el Rosario completo.

Siglo XX
Durante la segunda guerra mundial surge la Cruzada del Rosario. En USA (padre Peyton) nace el famoso lema "familia que reza unida permanece unida".

4. Siglo XIX-XX ¡Rezad el Rosario!

A comienzos del siglo XIX, el Rosario forma parte de la vida cotidiana del católico. Se piensa acertadamente que el cristianismo reclama devoción a nuestra Señora, y el amor a la Virgen implica rezar el Rosario. Años después, varios hechos invitaron a rezarlo más.

1858 (11 de febrero). Lourdes. Nuestra Señora se aparece con el rosario en la mano, e indica a Bernardette que lo rece. "La misma Santísima Virgen recomendó especialmente este modo de oración, cuando se apareció y lo enseñó a la sencilla muchacha en la gruta de Lourdes" (Pio XI, Ingravescentibus malis, 16).

1883. León XIII declara octubre como mes del Rosario.
1884. Segunda encíclica de León XIII invitando a rezar el Rosario.
1889. Tercera encíclica de León XIII insistiendo en rezar el Rosario.

1891-1898. Una encíclica es el documento de mayor categoría que escriben los Papas. Y ya llevamos tres encíclicas sobre el Rosario. Cualquiera podría pensar que el tema ya está claro. Pero el Papa necesita de las oraciones de los cristianos e insiste en el rezo del Rosario dedicándole 8 encíclicas más, año tras año: 1891-92-93-94-95-96-97 y 1898. Durante ocho años seguidos el Papa León XIII recomienda a los católicos el rezo del Rosario. Le ha dedicado 11 encíclicas (aparte de otros 11 documentos de menor categoría donde el Rosario es también el tema central).

En consecuencia, a comienzos del s.XX nadie duda de que un buen cristiano reza el Rosario. Sin embargo, en el cielo piensan que conviene insistir más, y Nª Señora interviene de nuevo.

1917 (13 de mayo). Fátima. Santa María se apareció a tres niños portugueses (Francisco, Jacinta y Lucia) y les cita los días 13 de cada mes, hasta octubre donde hizo un gran milagro ante 70.000 personas. En esas apariciones, habló a los niños de varios temas: la paz, la penitencia, la conversión, el desagravio, etc. Pues bien, María se presentó así: "soy la Señora del Rosario" (6ª aparición), y en cada una de las apariciones animó a los niños a que rezaran el Rosario.
León XIII había recomendado el Rosario con insistencia anual. Nuestra Señora lo recordó mensualmente.

5. Siglos XX y XXI

Esta insistencia tan reiterada no fue suficiente. Avanzado el siglo XX se extendió una aguda crisis en la Iglesia y en la devoción mariana. Por ejemplo, la década 1964-1974 se ha llamado "el decenio sin María" (tremendo). Y sin Dios, pues esta devoción no fue sustituida por ninguna otra.

Siglo XXI. Juan Pablo II escribe la encíclica "Rosarium Virginis Mariae". Allí:

Se declara un año dedicado al Rosario (octubre 2002 - octubre 2003).
Se proponen 50 avemarías más: los misterios luminosos, completando así el recorrido evangélico que se realiza al rezar el Rosario.